Y me dicen que he cambiado, que ya no me callo, que digo las cosas sin pensar si es adecuado, que tengo el corage que tanto buscaba, que ya no soy tan niña ni estoy tan asustada.

Y me dicen que he cambiado, yo tambien lo digo, aunque a veces siga anclándome en lo vivido. Ya he oído, he visto, y he comprobado que las personas no siempre están de tu lado.

Y me dicen que he cambiado (¿para bien o para mal?) y yo contesto, que ahora solo cabe esperar.

Que si el viento sopla, yo grito más fuerte.